TERMINANDO FUERTE – La Emboscada del Adulterio – Parte 3


3 TIPOS DE ADULTERIO

Parece haber 3 tipos de situaciones adúlteras:

1. Una aventura de una noche o una aventura durante un viaje: generalmente con alguien que no conoces bien, que puede no ser cristiana y es puramente lujurioso. Está basado en atracción física y es enteramente egoísta. No existe una relación de largo plazo.

2. Con una compañera del equipo de trabajo: alguien con quien pasas mucho tiempo y con quien gradualmente te vuelves muy cercano, hasta que cruzas la línea y eventualmente caes en adulterio.

3. Con una ‘mujer ideal’: alguien con la que puede que trabajes o no, que es justo lo que te gusta; hermosa, linda figura, una cristiana firme, alguien con quien puedes hablar durante horas, con quien tienes muchísimo en común y a quien realmente admiras. Hay ‘química’ y una fuerte atracción en espíritu, alma y cuerpo.

Los últimos dos tipos son más peligrosos para el cristiano porque pueden ser sutiles al principio y mantenerse escondidos en la persona. Es por esto que hay otros factores en el trabajo, aparte de solamente lujuria: factores como amistad, admiración, visiones y sueños compartidos, actividades piadosas, etc.

Estos buenos factores pueden causar que el hombre y la mujer involucrados, al igual que sus amigos, justifiquen la relación creciente, y se transforme en una cubierta para más motivos siniestros.

3 ETAPAS DEL ADULTERIO

Una vez que los cristianos, especialmente los creyentes comprometidos, creen que son inmunes, niegan fácilmente que están siendo tentados. Cuanto más grande sea la negación, más grande será el engaño. Pequeñas concesiones toman furtivamente el control. Empiezan a tratar con las situaciones como si fuesen serpientes domesticadas que no representaran amenaza alguna. De hecho, puede que no reconozcan el peligro hasta que ya sea demasiado tarde.

Muchos cristianos no se dan cuenta de en cuánto peligro están. Su falso sentido de seguridad e inmunidad les adormece en la complacencia en vez de vigilar y guardar sus corazones. ¡Esta actitud es extremadamente dañina! Muchas de las personas que han caído en pecados sexuales con las que he hablado, dicen: ‘¡Nunca pensé que esto pudiera suceder!’

1 Cor. 10:12 - ¡Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga!

El otro gran peligro es que subestiman la resistencia que la otra persona presentará. Piensan que la otra persona no está interesada en ellos o que pondrá límites, y así, permiten a la relación llegar directamente hasta el pecado sin aplicar ningún tipo de freno.

Existen 3 que atraviesan las personas antes de cometer adulterio:

1. Etapa de Conversación

En esta etapa la persona realmente les escucha, o ellos la escuchan. Y se habla con mucha ternura; algo que, generalmente, no está sucediendo en el matrimonio.

Hay deleite emocional entre los dos y contacto físico inocente. Una buena advertencia es: '¡Si estás esperando que te den el siguiente abrazo, puede que estés en problemas!'

2. Etapa de Amistad

En esta etapa los dos están acercándose, pero dicen; ‘Solo somos buenos amigos’. Están viviendo en negación y engaño.

Esta amistad íntima luego crece hasta la muy peligrosa siguiente etapa.

3. Etapa de Pertenencia

La pareja pasa tiempo escondida a solas, sin conocimiento de la esposa y hermanos de la congregación.

Estos tiempos secretos juntos se cubren con medias verdades y mentiras.

Los dos intercambian llamadas telefónicas, mensajes, e-mails, tarjetas, notas, y regalos, así como conversaciones y miradas íntimas. Son absorbidos cada vez más el uno por el otro y están constantemente en la mente del otro.

La presión emocional y la tentación física ahora es irresistible. Las luces de advertencia están en rojo. Las campanas de alarma están sonando fuerte. Puede que la pareja (lo que son ahora) haya sido advertida por amigos acerca del peligro inminente; ¡Pero no les interesa! Están intoxicados con amistad, lujuria, y/o enamoramiento.

Muy pronto empiezan a tocarse inapropiadamente, ¡¡Y rápidamente caen en una espiral fuera de control hasta el acto sexual!!

Eventualmente los adúlteros son descubiertos; tu pecado siempre te alcanzará, ¡SIEMPRE! Recuerda, nada se esconde debajo del sol. Muy a menudo el adulterio termina en aflicción, vergüenza y divorcio. Leemos acerca del trágico fin del adúltero en Proverbios 5 al 7.

Prov. 5:3-5
Porque los labios de la mujer extraña destilan miel, y su paladar es más blando que el aceite; Mas su fin es amargo como el ajenjo, agudo como espada de dos filos. Sus pies descienden a la muerte; Sus pasos conducen al Seol.

Prov. 5:8-14
Aleja de ella tu camino, y no te acerques a la puerta de su casa; para que no des a los extraños tu honor, y tus años al cruel; no sea que extraños se sacien de tu fuerza, y tus trabajos estén en casa del extraño; y gimas al final, cuando se consuma tu carne y tu cuerpo, y digas: ¡Cómo aborrecí el consejo, y mi corazón menospreció la reprensión; no oí la voz de los que me instruían, y a los que me enseñaban no incliné mi oído! Casi en todo mal he estado, en medio de la sociedad y de la congregación.

Prov. 6:25-35
No codicies su hermosura en tu corazón, ni ella te prenda con sus ojos; porque a causa de la mujer ramera el hombre es reducido a un bocado de pan; y la mujer caza la preciosa alma del varón. ¿Tomará el hombre fuego en su seno sin que sus vestidos ardan? ¿Andará el hombre sobre brasas sin que sus pies se quemen? Así es el que se llega a la mujer de su prójimo; no quedará impune ninguno que la tocare. No tienen en poco al ladrón si hurta para saciar su apetito cuando tiene hambre; pero si es sorprendido, pagará siete veces; entregará todo el haber de su casa. Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento; corrompe su alma el que tal hace. Heridas y vergüenza hallará, y su afrenta nunca será borrada. Porque los celos son el furor del hombre, y no perdonará en el día de la venganza. No aceptará ningún rescate, ni querrá perdonar, aunque multipliques los dones.

Prov. 7:21-27
Lo rindió con la suavidad de sus muchas palabras, le obligó con la zalamería de sus labios. Al punto se marchó tras ella, como va el buey al degolladero, y como el necio a las prisiones para ser castigado; como el ave que se apresura a la red, y no sabe que es contra su vida, hasta que la saeta traspasa su corazón. Ahora pues, hijos, oídme, y estad atentos a las razones de mi boca. No se aparte tu corazón a sus caminos; no yerres en sus veredas. Porque a muchos ha hecho caer heridos, y aun los más fuertes han sido muertos por ella. Camino al Seol es su casa, que conduce a las cámaras de la muerte.

Tiempos de vulnerabilidad

Necesitamos estar atentos a momentos vulnerables en nuestras vidas. En estos momentos somos más susceptibles a cometer adulterio:

- Soledad
- Aburrimiento
- Estrés
- Decepción
- Autocompasión
- Complacencia; creyendo que te has graduado de las cosas básicas y que estás fuera del alcance de la tentación.
- Transiciones en la vida; especialmente aquellas que te hacen inseguro, por ejemplo, la crisis de la edad madura.
- Viajes
- Exposición a la pornografía (a través de películas, música, clubes nocturnos, etc.)
- Problemas sexuales pasados sin resolver
- Problemas matrimoniales; sexuales, financieros, conversacionales
- Y la lista continúa...